- De no ser atendida, una víctima de ciberbullying corre el riesgo de sufrir las siguientes consecuencias:
- Ausentismo escolar.
- Abuso en consumo de sustancias nocivas para la salud.
- Depresión y otros problemas psicológicos.
- Desarrollo de baja autoestima.
- Cambios en comportamiento.
- Relaciones deterioradas con sus padres.
- Suicidio
La transparencia, la información y la confianza pueden ayudar mucho a evitar que hijos, hermanos y otros menores que conozcamos caigan en el ciberbullying. Es fundamental concienciar sobre esta práctica y sus consecuencias, así como ayudarlos a utilizar Internet con responsabilidad. Incluso, herramientas como el control parental pueden ser un buen recurso para garantizar este buen uso.
Uno de los principales conceptos que hay que hacer entender a los jóvenes usuarios de la Red es el de la privacidad, así como alertarles de los riesgos que puede suponer sobreexponerla. Algunas recomendaciones básicas pasan por privatizar los perfiles en redes sociales, agregar a estas redes solo a personas de confianza, cambiar las contraseñas con frecuencia y configurar las opciones de privacidad de las distintas plataformas.
Entre los peligros más comunes de la Red está la circulación de bulos; es decir, rumores y noticias falsas que pueden poner en riesgo la privacidad e intimidad de los que lo reciben. Una forma de Ciberbullying es difundirlos y utilizarlos para que, cuando las víctimas caigan en ellos, sean amenazadas y chantajeadas. Cuerpos de seguridad oficiales como la Policía Nacional usan sus redes sociales para desmentirlos y alertar sobre ellos.
Una clave para emplear las plataformas digitales con responsabilidad es tener en cuenta que, una vez que se envía un archivo, el propietario pierde el control del mismo. Por ello, hay que huir de difundir datos personales y fotografías, sobre todo si se trata de contenido sensible. Y, por supuesto, también hay que hacer ver a los acosadores potenciales que difundir este tipo de contenido supone un delito.
5. Emplear los recursos y herramientas para denunciarLa mejor respuesta al ciberbullying no es la violencia ni contrarrestar con el mismo ataque. Al contrario de ello, tanto los afectados por este acoso como los que lo presencian lo que deben hacer es denunciar y alertar a los organismos correspondientes (Policía, la propia escuela, moderadores de redes sociales y plataformas, etc.). Y, por supuesto, también están disponibles para informarse las páginas webs y los teléfonos de ayuda de instituciones.
En definitiva, acabar con el ciberbullying es una tarea que requiere concienciación y actuación, pero, sobre todo, la implicación y la lucha de todos.
Muy bien estructurado
ResponderEliminarBuen trabajo compañero.
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